El incienso ha estado presente desde la antigüedad hasta nuestros
días en una serie de celebraciones y cultos y es un ingrediente que no
sólo acompaña a los rituales religiosos sino también a aquellos eventos
más cotidianos.
Posiblemente es el incienso la resina aromática más popular y la más
solicitada. Ha sido utilizada para acompañar a uno en las oraciones,
para alabar a Dios, purificar el aire, liberarnos de las vibraciones
negativas, despertar la conciencia y mejorar el estado de animo.
Originariamente es una goma resinosa que
se obtiene de un árbol de Etiopía llamado Olíbano.
Sin embargo lo que
hoy podemos encontrar en los comercios y a lo que se denomina comúnmente
como “incienso” es realmente una mezcla de Olíbano y otras resinas,
esencias y aceites.
Podemos encontrar incienso en combinación con resinas como la mirra,
la canela, el sándalo, el almizcle, el ámbar; con esencias de benjuí, de
cedro, de avellana, de romero, etc, y aceites de rosa, de anís, de
tomillo, etc. Por este motivo no existe un “único incienso” sino una
gran variedad de ellos con aromas y propiedades diferentes dependiendo
de los ingredientes que lleve la mezcla.
En la actualidad existen una gran variedad de inciensos. Unos más
baratos y otros más caros, en forma de grano o de varillas. Sin embargo
es recomendable tener una cierta precaución a la hora de comprarlos pues
existen muchos de ellos, de muy mala calidad, que pueden resultar
tóxicos al haberles añadido otras sustancias que permiten una fácil
combustión. Lo más adecuado es adquirirlos en establecimientos o tiendas
esotéricas donde nos aseguren su calidad y su inocuidad.
El incienso tiene grandes poderes espirituales. Por ejemplo, facilita
la concentración y la meditación individual o de un grupo, crea un
ambiente placentero en nuestras casas o en nuestro trabajo liberándonos
de energías negativas, atrae la energía positiva y purifica el entorno y
a las personas librándonos de las malas influencias, concentra las
fuerzas y las dirige hacia el objetivo que nos hemos propuesto siendo
capaz de ayudarnos a conseguir lo que en un determinado momento
deseamos. Perfuma, relaja y armoniza la mente. En definitiva, es un
ingrediente más para que nuestras prácticas mágicas se consumen con
éxito.
SABER USAR LOS INCIENSOS
Quemar incienso es una tradición utilizada por todas las
civilizaciones de la antigüedad. Cuando se logra dominar bien sus
efectos, y se entiende como ciertos olores alteran el estado anímico de
la persona, se obtiene unos resultados realmente sorprendente.
Cada fragancia tiene su propia energía vibratoria, así que, el
incienso puede ser seleccionado de acuerdo al estado que desea llegar la
persona, ya sea para eliminar un estado de estrés, un profundo estado
de relajación, o llegar a un estado de sanación. Es un excelente
acompañante para hacer afirmaciones. Otras personas seleccionan el
incienso de acuerdo a su corazonada, su intuición, logrando el objetivo
deseado.
Existen una gran variedad de aromas o olores. Algunas son utilizadas
con propósito especifico.
Para quemarlos lo mejor es buscar un lugar especial, algún rincón
favorito de la casa y ponerlo en recipientes especiales, pebeteros o
incensarios en el caso de los inciensos en grano, y en tablillas
especiales en el caso del incienso en varillas. Las varillas no revisten
ninguna dificultad, posiblemente es la forma más cómoda de quemar
incienso, sólo tenemos que sujetar la varilla en una tablita especial y
prenderle fuego con la llama de una cerilla o mechero. En el caso del
incienso en grano se queman sobre carbón vegetal que previamente hemos
incendiado en el pebetero o incensiario.
PARA QUE SIRVE CADA INCIENSO
- Incienso natural: revitalizante, despeje mental , clarificador, relajante ideal en la meditación, estabilizador emocional.
- Estoraque: suavizante y unificador atrae gente, relaja es sensual y activa lo sexual, armonizante emocional, sensual, unifica, para el amor.
- Ámbar: revitalizante en lo anímico, anti estrés, estabiliza en general.
- Jazmín: estimulante anímico, antidepresivo, unificador.
- Patchuli: para la meditación , estabilizador, para lo sensual y para el dinero.
- Frutilla: para los afectos y las emociones, unifica y relaja, es anti estrés.
- Pino: es refrescante y revitalizante; despeja la psiquis.
- Eucaliptus: relajante y refrescante, clarifica y optimiza.
- Violeta: suaviza, relaja, unifica y estabiliza anímicamente.
- Lavanda: revitalizante, refrescante, ayuda al despeje psíquico y a la sensación de paz.
- Jazmín: mejora la meditación y aumenta el apetito sexual.
- Frankincensé: atrae el dinero, ayuda a la meditación y al despojo.
- Rosa: atrae el amor, sirve para aprender a amarse uno mismo y para atraer la amistad.
- Jengibre: Para el poder. También relaja el espíritu.
- Cedro: para la limpieza y la purificación. Ayuda a la valentía.
- Sándalo: protección, sanación.
- Mirra: protección, espiritualidad.
- Gardenia: para aliviar el dolor de un amor.
- Coco: protección, purificación.
- Canela: para atraer el dinero y el éxito
Me encanta el incienso de Sandalo, su aroma Wow! me fascina <3 :)
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